La asociación Mujeres no Estándares organiza las primeras jornadas de las mujeres con diversidad funcional El lunes 12 de junio, se celebraron las primeras jornadas sobre el colectivo de las mujeres con discapacidad organizadas por la asociación Mujeres
La asociación Mujeres no Estándares organiza las primeras jornadas de las mujeres con diversidad funcional
El lunes 12 de junio, se celebraron las primeras jornadas sobre el colectivo de las mujeres con discapacidad organizadas por la asociación Mujeres no Estándares , con el objetivo de desmontar prejuicios, mostrar las capacidades y las competencias laborales de mujeres con diversidad funcional y buscar la complicidad empresas para que contraten a mujeres con potencialidades diferentes.
Según datos de la propia asociación, el 16% de brecha salarial entre hombres y mujeres alcanza el 38% en el caso de las mujeres con discapacidad. Concretamente en Cataluña, el 29% de las mujeres con discapacidad se encuentran en paro, frente al 13,5% de las mujeres sin discapacidad.
En la conferencia ha participado la consejera de Igualdad y Feminismos, Tania Verge, ha llamado la atención sobre que, «aunque se avanza, hay que poner la quinta marcha» en la integración laboral de las mujeres con diversidad funcional.
Virgen ha añadido que el feminismo no conseguirá sus objetivos si no se equiparan en derechos sólo algunas mujeres y no todas, sea cual sea su interseccionalidad.
Por su parte, la presidenta de Mujeres no Estándares, Carme Riu, reclamó «un cambio de mentalidad en la empresa privada respecto a las mujeres con diversidad funcional y el apoyo de la administración» .
Esta asociación se creó en 1995 y desde entonces ha luchado por la plena inclusión de las mujeres con discapacidad tanto en el ámbito social como laboral.
Como explicó Silvia Fernández, una de las trabajadoras sociales de la entidad «el objetivo es que las mujeres con discapacidad salgan de sus hogares y ocupen el espacio público» . «Cuando una mujer llega la asociación se le hace pasar por un curso de inserción laboral que comienza por un módulo de activación de la autoestima, dado el estigma que sufre la mayoría sobre sus capacidades», añadió .
«Además les realizamos varios tests de capacitaciones e intereses laborales, les ayudamos a preparar entrevistas de trabajo y actualizamos sus currículums» , ha apuntado la trabajadora social.
Un ejemplo es Marta Nicolás, de 51 años y con más de un 65% de discapacidad, que explicó que el trabajo de limpiadora que ha conseguido después de años sin trabajo le ha “devuelto la autoestima”. “Había trabajado 20 años de dependienta, pero después estuve una década fuera del mercado por las consecuencias del maltrato psíquico y físico de mi expareja. En la asociación me han ayudado mucho, he recibido mucha comprensión” , añadió.
En la jornada también participó la presidenta de la asociación Mujeres Directivas y Empresarias, Núria Viñas, quien aseguró que las compañías que no dan trabajo a las mujeres con discapacidad «hacen el ridículo» y son «poco conscientes « tanto de las ventajas fiscales como, especialmente, de la funcionalidad y capacidad de trabajo de las personas personas de este colectivo.